https://www.youtube.com/watch?v=xrxd8va5blM

 

¿Te pica o incluso te duele la garganta después de cantar un rato?¿Sientes que estás gritando cuando llegas al agudo? Una de las causas más probables es que estás cantando de garganta. Vamos a intentar solucionarlo.

 

Cantar con la garganta es la forma más sencilla de hacer que te salgan nódulos, o incluso de provocarte otros problemas vocales más graves. Nunca cantes con la garganta, y si alguna vez te duele la garganta mientras cantas, lo mejor es que pares y descanses un rato.

 

 

Yo considero que la técnica siempre se debe poner al servicio de la expresión. No importa si alguna vez descolocas la voz para impulsar una interpretación más expresiva. Sin embargo, no apoyar, es decir, no utilizar correctamente el diafragma al cantar, es un fallo imperdonable que no queda estético jamás. Por eso, es un problema que debes atacar cuanto antes.

 

Puede haber muchos motivos por los que estás cantando con la garganta o sin emplear el diafragma correctamente. Si crees que te está pasando, lo mejor es que acudas a un profesor de canto que te escuche y te diga exactamente cuál es tu problema y cómo solucionarlo. De momento, veamos si puedes solucionarlo tú solo. Por eso, vamos a repasar juntos cómo funciona la emisión vocal y vamos a pensar por qué estás cantando con la garganta y cómo puedes cambiar al diafragma.

 

Comencemos hablando de la respiración.

 

Los pulmones son dos bolsas de aire. Si yo dejo una bolsa de plástico en la atmósfera, está llena porque el aire es un fluido y por tanto lo impregna todo, pero no se hincha y se deshincha sola a no ser que intervenga una fuerza externa. En nuestro caso, esa fuerza externa es el diafragma.

 

 

El diafragma es un músculo que se encuentra justo debajo de las costillas. Cuando coges aire, el diafragma baja para empujar el aire hacia dentro de los pulmones. Al bajar, desplaza todos los órganos de la tripa, y por ello, se hincha la tripa. Cuando lo sueltas, el diafragma vuelve a su posición original.

 

 

Aunque aparentemente el diafragma se mueva de forma involuntaria, es posible controlarlo para dosificar la salida del aire, pero para ello debemos fortalecerlo. Las ventajas más evidentes y visibles de tener un diafragma fuerte y un apoyo constante y adecuado para cada nota son:

 

  • No te va a salir ni un solo gallo más
  • Vas a tener VIBRATO
  • Vas a poder hacer agilidades y melismas más rápidos

 

Todo esto lo trataremos más adelante tanto en este blog como en el canal de Youtube y en el Instagram de la Escuela, por lo que te recomiendo que nos sigas en todas las redes para enterarte el primero.

 

En primer lugar, te propongo que sientas tu diafragma. Coge aire sacando tripa, sin mover los hombros, y al exhalar procura que la barriga no vuelva a su posición inicial sino que se quede fuera. Esa es la manera de hacer fuerza en el diafragma.

 

Una de las claves para verificar que estás empleando el diafragma al respirar es comprobar que al cantar expulsas por la boca aire caliente. Haz la prueba ahora mismo. Verás que no es tan sencillo, pero ahora que eres consciente te será más fácil entrenarlo.

 

 

 

En el video de youtube correspondiente a esta entrada te recomendé tres ejercicios muy sencillos para que puedas entrenar tu diafragma y conseguir uno tan duro como una bombona de butano.

 

¡Comenta en esta entrada todas tus dudas! Además, si tienes algún tema del que te gustaría que hablara, también me encantaría saberlo.

 

¡Espero que nos leamos pronto!